OM NAMAH SHIVAYA
OM NAMAH SHIVAYA
.Arunáchala Shiva.
SER
.Bhagavan Sri Ramana Maharshi.
SER
.Arunáchala Shiva.
SER
SER
El Ordenador controla el destino de las almas de acuerdo con sus anteriores acciones.
Lo que está destinado a no ser, no será, a pesar de todo lo que nosotros podamos hacer.
Será lo que haya de ser, aun cuando tratemos de impedirlo.
Esta es la verdad.
Por lo tanto la mejor opción es permanecer en Silencio.
SER
SER
El Ordenador controla el destino de las almas de acuerdo con sus anteriores acciones.
Lo que está destinado a no ser, no será, a pesar de todo lo que nosotros podamos hacer.
Será lo que haya de ser, aun cuando tratemos de impedirlo.
Esta es la verdad.
Por lo tanto la mejor opción es permanecer en Silencio.
SER
Arunáchala Shiva temple.
Tiruvannamalai. Tamil Nadu.
(1890)
.Templo Arunáchala Shiva, Tiruvannamalai, hoy.
.Arunáchala Shiva.
SER
.Bhagavan Sri Ramana Maharshi.
SER
.Himnos - Sri Ramana Maharshi.
.Sri Ramanasramam.
-.Tiruvannamalai.-
Los cinco Himnos a Arunáchala son los primeros poemas que compuso el Maharshi a excepción de algunos versos cortos.
Fueron escritos hacia 1914.
"La Guirnalda Marital de Letras" ("Akshara Mana Malai") el primero y el más importante de sus himnos a Arunachala, el mismo nombre de la canción revela su significado; la novia es el alma individual y el novio es el Señor Arunáchala.
Aquellos que cantan o incluso que escuchan este himno se siente inundados de alegría.
El Maharshi remarcó una vez jocosamente que este himno nos alimentó durante muchos años.
Las "Once Estrofas" y las "Ocho Estrofas" vinieron después.
Estos poemas brillan como un comentario divinamente inspirado sobre la Verdad que motiva e instruye a los buscadores.
.Ocho Estrofas.
1. Mira, ahí está como una Colina inerte.
Misteriosa es la forma en que funciona, más allá de toda comprensión humana.
Desde mi infancia desprovista de conocimiento, la inmensidad de Arunachala ha brillado en mi conciencia.
Pero incluso cuando me enteré a través de otro de que era solamente Tiruvannamalai, no me di cuenta de su significado.
Cuando me atrajo hacia ella, aquietando mi mente, y me acerqué, vi que era la quietud absoluta.
2. Indagando dentro "¿quién es el que ve?", vi desaparecer al que ve y se me reveló Eso que permanece por siempre.
Si ningún pensamiento surgió para decir "yo vi".
Entonces ¿cómo podría surgir el pensamiento "yo no vi"?
¿Quién tiene el poder para expresar todo esto en palabras, cuando incluso Tú (como Dakshinamurti) lo transmitiste en el pasado solamente a través del silencio?
Y con el fin de revelar Tu estado trascendente, a través del silencio, Tú permaneces aquí, como una Colina resplandeciente alzándose hacia el cielo.
3. Cuando me acerco a Ti pensando que Tú tienes forma, Tú permaneces como una Colina en la tierra.
Si uno que Te considera como sin forma quiere todavía verte a Ti, es como aquel que deambula por el mundo queriendo ver el éter (ubicuo, invisible).
Meditando en Tu Ser sin forma, sin pensamiento alguno, mi forma (mi entidad separada) se disuelve como una muñeca de azúcar en el océano.
Y cuando me doy cuenta de quién soy yo, ¿qué existencia tengo yo aparte de Ti, ¡Oh!, Tú que permaneces como la poderosa Colina Aruna?
4. Buscar a Dios ignorándote a Ti que permaneces como la Existencia y brillas como la Consciencia es como buscar la oscuridad con una lámpara en la mano.
Para revelarte a Ti mismo al fin como Existencia-Consciencia, Tu moras tomando formas distintas en todas y cada una de las religiones.
Si todavía hay gente que no logra verte a Ti como Existencia-Conciencia, ellos no son mejores que el ciego que no tiene conocimiento de la existencia del Sol.
¡Oh poderosa montaña Aruna!, Joya incomparable, permanece y brilla, como el Primero sin el segundo, como el Ser dentro de mi Corazón.
5. Como el hilo que mantiene unidas a todas las perlas en un collar, así eres Tú que insertas y unes a todos los seres y a todas las religiones.
Si, como una joya que es cortada y pulida, la separada mente es afilada con la piedra de afilar de una Mente pura universal, obtendrá la luz de tu Gracia y brillará como un rubí cuya luminosidad no se verá ensombrecida por ningún otro objeto.
Cuando la luz del Sol ha caído sobre una placa fotográfica, ¿podría la placa registrar otra imagen?
A parte de ti, ¡Oh Montaña Aruna! luminosa, auspiciosa, ¿existe alguna otra cosa?.
6. Sólo Tú existes, ¡Oh Corazón!, resplandor de la Consciencia.
En Ti mora un poder misterioso, un poder que sin Ti no es nada.
De ello (de este poder de manifestación) procede, junto con un veedor, una serie de sutiles pensamientos sombríos que, iluminados por la luz reflejada de la consciencia en medio de las vueltas que da el destino (prarabdha), aparecen simultáneamente, dentro como un espectáculo impreciso del mundo y fuera como el mundo percibido a través de los cinco sentidos, como una película que es proyectada a través de una lente.
Sean percibidos o no, esos (pensamientos) no son nada aparte de Ti, ¡Oh Colina de Gracia!.
7. Si el pensamiento "yo" no existe, ningún otro pensamiento puede existir.
Cuando surjan otros pensamientos, uno debe preguntarse "¿a quién surgen? ¿A mí? ¿De donde surge este "yo"?"
Indagando de esta manera dentro, si uno rastrea la fuente de la mente y llega al Corazón, uno deviene el Soberano Señor del Universo.
No habrá más ilusiones tales como dentro y fuera, bien y mal, nacimiento y muerte, placer y dolor, luz y oscuridad, ¡Oh océano ilimitado de Gracia y Luz!, Arunachala, que baila la danza de la quietud en la Corte del Corazón.
8. Las gotas de lluvia derramadas por las nubes, que surgen del mar, no descansarán, a pesar de todos los obstáculo, hasta alcanzar una vez su morada, el océano.
El alma encarnada procedente de Ti, a través de las diferentes vías elegidas por él mismo, puede vagar sin rumbo fijo durante un tiempo, pero no podrá descansar hasta reunirse Contigo, la fuente.
Un pájaro puede volar de aquí para allá, pero no puede posarse en mitad del cielo.
Debe retroceder por el camino que vino para buscar, solo en la tierra, su lugar de descanso.
Así, el alma debe volver hacia Ti, ¡Oh Colina Aruna! y fundirse de nuevo solamente en Ti, Océano de Felicidad.
SER
Sri Arunáchala Stuti Pachakam
(La Guirnalda Nupcial de Letras en Alabanza de Sri Arunáchala)
Sri Ramana Maharshi
Ignitus Ediciones, S. L.
Madid.
(2009)
SER
Paravidya Upanishad
(El Verdadero Conocimiento de la Realidad Última)
Sri Ramana Maharshi
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2007)
Sri Ramanopadesa Noonmalai
(Guirnalda de Tratados de Instrucción Espiritual)
Sri Ramana Maharshi
Comentado por Sri Sadhu Om
(En este libro también están Nam Yar ¿Quién soy yo? y Upadesa Undiyar comentados por Michael James)
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2009)
Guru Vachaka Kovai
(Colección de Enseñanzas de Sri Ramana Maharshi)
Sri Muruganar
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2007)
Padamalai
Enseñanzas de Sri Ramana Maharshi
Sri Muruganar
Editorial Sanz y Torres, S.L.
Colección Ignitus
Madrid.
(2010)
SER
SER
SER
SE LO QUE ERES
(Las Enseñanzas de Sri Ramana Maharshi)
Primera edición en Español publicada por Sri Ramanasramam
Tiruvannamalai, 606603, India.
(1994)
.INDAGACIÓN DEL YO.
Teoría.
Cuando se le preguntaba qué práctica espiritual recomendaba para facilitar la conciencia del Ser, aconsejaba una técnica que denominó la indagación del yo.
La indagación del yo tiene por objetivo descubrir por propia experiencia que la mente no existe.
Sri Ramana afirmaba que la indagación del yo se podría lograr simplemente al soltar la idea de que hay un ser individual que funciona a través del cuerpo y la mente.
De acuerdo a Sri Ramana, toda actividad consciente de la mente o el cuerpo supone tácitamente que hay un "yo" haciendo algo.
El factor común : "yo pienso", "yo me acuerdo", "yo actúo", es el "yo" que asume la responsabilidad de todas las actividades.
Sri Ramana llamaba a este factor común el "pensamiento-yo" (aham-vritti).
(Aham-vritti literalmente quiere decir "la modificación mental del yo").
El Ser o "Yo" real nunca se imagina que está haciendo o pensando algo; mientras que el "yo" que imagina todo esto es una creación mental y por eso se le denomina una modificación mental del Ser.
Sri Ramana afirmaba que la noción de individualidad no es nada más que el "pensamiento-yo" que se manifiesta en diversas formas.
En lugar de tomar las distintas actividades de la mente (el ego, el intelecto, la memoria) como funciones separadas, prefería verlas como distintas formas del "pensamiento-yo".
Al decir que la individualidad es igual a la mente y la mente es igual al "pensamiento-yo", se concluye que la desaparición del sentido de individualidad (o sea la realización del Ser) implica también la desaparición tanto de la mente como del "pensamiento-yo".
Esto lo afirmaba en sus frecuentes comentarios sobre el estado después de la realización del Ser en el cual no hay un pensador de pensamientos, no hay un actor de acciones, ni conciencia de una existencia individual.
El"pensamiento yo" es una suposición que no tiene existencia real, explicaba Sri Ramana que su aparición dependía de la identificación con un objeto.
Cuando surgen pensamientos, el "pensamiento-yo" los reclama como propios :
"yo pienso", "yo creo", "yo quiero", "yo estoy actuando".
No hay un "pensamiento-yo" que exista en forma independiente de los objetos con los cuales se identifica.
Aparenta existir como entidad real y continúa debido al flujo incesante de identificaciones que suceden.
Casi todas las identificaciones se basan en la premisa inicial que el "yo" está limitado al cuerpo, ya sea como dueño, ocupante o coexistente con la forma física.
Esta idea, "yo soy el cuerpo", es la fuente inicial de todas las identificaciones equivocadas y su disolución es la meta principal de la indagación del yo.
Sri Ramana afirmaba que la tendencia hacia las identificaciones auto-limitantes podían disminuir si se trataba de separar el sujeto "yo" de los objetos con los cuales se habían identificado.
Dado que el "pensamiento yo" individual no puede existir sin un objeto, si la atención se enfoca hacia la percepción subjetiva del "yo" o "yo soy" con tal intensidad que los pensamientos "yo soy esto" o "yo soy aquello" no surgen, entonces el "yo" individual no podrá conectarse con los objetos.
Si se mantiene la conciencia del "yo", el "yo" individual ( o sea, el pensamiento "yo") desaparecerá, y en su lugar habrá una experiencia directa del Ser.
Esta atención constante a la conciencia interna "yo" o "yo soy" fue denominada por Sri Ramana indagación del yo (vichara) y la recomendaba constantemente como la vía más efectiva y directa para descubrir la irrealidad del "pensamiento yo".
La etapa en la cual se tiene la experiencia del sujeto (el que ve) en lugar de la conciencia de un objeto (lo visto) es la fase culminante de la indagación del yo.
Algunas veces, mencionaba que pensar o repetir la palabra "yo" mentalmente también lo lleva a uno en la dirección correcta, pero es importante notar que esto es solamente una etapa preliminar de la práctica.
La repetición del "yo" todavía involucra a un sujeto (el "pensamiento yo"), que tiene la percepción de un objeto (los pensamientos "yo, yo"), y mientras exista esa dualidad el "pensamiento yo" continuará sobreviviendo.
Sólo desaparecerá finalmente cuando la percepción de todos los objetos, tanto físicos como mentales, haya cesado.
Esto no se logra a través de estar consciente de un "yo", sino solamente siendo el "yo".
La fase culminante de la indagación del "yo", es la etapa en la cual se tiene la experiencia del sujeto en lugar de la conciencia de un objeto.
Sri Ramana afirmaba consistentemente que la mayoría de las demás prácticas no eran efectivas.
Frecuentemente subrayaba que las meditaciones tradicionales y prácticas de yoga requieren de un objeto, y usualmente añadía que este tipo de relación reforzaba el "pensamiento yo", en lugar de eliminarlos.
Tales prácticas pueden aquietar la mente, y quizás produzcan experiencias de gozo, pero no terminarán en la realización del Ser porque el "pensamiento yo" no ha sido aislado y desprovisto de su identidad.
.INDAGACIÓN DEL YO.
.Práctica.
Sri Ramana aconsejaba a los principiantes en la práctica de la indagación del yo, que pusieran su atención sobre la percepción interior de "yo" y que la mantuvieran el mayor tiempo posible, indicaba que si la atención se dispersaba debido a otros pensamientos, que la revirtieran sobre el "pensamiento yo".
Sugería diversos apoyos para continuar el proceso, tal como el preguntarse :
"¿Quién soy yo?" o bien "¿De dónde surge este yo?".
Pero la meta final es estar continuamente atento al "yo" que asume la responsabilidad de todas las actividades del cuerpo y la mente.
En las primeras etapas de la práctica la atención que se le da a la percepción de "yo" es una actividad mental asimilable a un pensamiento o una sensación.
Al desarrollar la práctica, el "pensamiento-yo" se convierte en una sensación subjetiva de la experiencia de "yo" y cuando dicha sensación deja de conectarse e identificarse con pensamientos y objetos, desaparece completamente.
Lo que queda es una experiencia de la existencia en la cual el sentido de individualidad ha dejado de operar temporalmente.
Al principio la experiencia puede ser intermitente, pero con una práctica repetida se vuelve más fácil de obtener y mantenerla.
Cuando la indagación del yo llega a este nivel, hay una conciencia sin esfuerzo por existir, en la cual ese esfuerzo individual ya no es posible dado que el "yo" que hace el esfuerzo ha dejado de existir momentáneamente.
No es aún la realización del Ser porque el "pensamiento-yo" vuelve a surgir periódicamente, pero es la etapa más elevada de la práctica.
La experiencia de este estado de existencia en repetidas ocasiones va debilitando y destruyendo las vasanas (tendencias mentales), causantes del "pensamiento-yo".
Cuando estas tendencias mentales se debilitan lo suficiente, el poder del Ser destruye las tendencias residuales en forma total y el "pensamiento-yo" nunca vuelve a surgir.
Este es el estado final e irreversible de la realización del Ser.
No es un ejercicio de concentración, ni trata de suprimir los pensamientos : meramente procura prestar atención a la fuente de donde surge la mente.
El método y meta de la indagación del yo es mantenerse en la fuente de la mente y estar atento a lo que uno realmente es, al quitar la atención e interés de lo que uno no es.
Durante las etapas iniciales el esfuerzo de transferir la atención de los pensamientos al pensador es esencial, pero una vez que la sensación del sentido de "yo" se ha establecido firmemente, cualquier esfuerzo adicional es contraproducente.
De allí en adelante se vuelve un proceso más bien de ser y no de hacer : de ser, sin esfuerzo y no de un esfuerzo por ser.
Ser lo que uno ya es no requiere de esfuerzo, dado que el sentido de ser siempre está presente y siempre se experimenta.
Por otro lado, el pretender ser lo que uno no es (o sea el cuerpo y la mente), requiere de esfuerzos mentales constantes, aunque se lleven a cabo a un nivel subconsciente.
Por lo tanto, en las últimas etapas de la indagación del yo los esfuerzos restan atención a la experiencia de ser, mientras que el cesar esfuerzos mentales la revela.
En fin, el Ser no se puede descubrir haciendo algo, sino solamente siendo.
Como dijo Sri Ramana una vez :
"¡No medite : sea!
"¡No piense que es : sea!
"¡No piense como ser : usted es!"
La indagación del yo no se debe calificar como una práctica de meditación que se lleva a cabo a ciertas horas y en ciertas posturas; debe continuar a través de todo el día mientras estemos despiertos, sin importar la actividad que desempeñemos.
Sri Ramana no veía ningún conflicto entre el trabajo ordinario y la indagación del yo; decía que con un poco de práctica se podía llevar a cabo en todo tipo de circunstancias.
A la vez, decía que para los principiantes, periodos regulares de práctica formal eran útiles, pero nunca fue partidario de largos periodos de meditación en silencio y sentado.
Además siempre se opuso a que alguno de sus devotos expresara el deseo de dejar sus actividades mundanas a favor de una vida meditativa.
"Yo existo" es la única experiencia permanente y auto-evidente de toda persona.
Nada es tan evidente como "yo soy".
Lo que la gente llama evidente, es decir, la experiencia que se obtiene a través de los sentidos, no es para nada auto-evidente.
Sólo el Ser se presenta como tal.
Por lo tanto, llevar a cabo la indagación del yo y ser el "yo soy" es lo único que uno debe hacer.
"Yo soy" es la Realidad.
Yo soy "esto" o lo "otro" es irreal.
"Yo soy" es la verdad; es otro nombre para Ser.
La devoción es solamente conocerse a sí mismo.
Al ver cuidadosamente, se constata que la devoción suprema y jñana son en esencia uno y lo mismo.
Decir que uno de los dos es el camino hacia el otro se debe a que no se conoce la naturaleza de ambos.
Sepa que el camino de jñana y el de la devoción están interrelacionados.
Siga estos dos inseparables caminos sin separar uno del otro.
SER
SER
SER
Sea lo que usted es
(Las enseñanzas de Sri Ramana Maharshi)
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2007)
Día a día con Bhagavan
De un diario de
A. Devaraja Mudaliar
(Que abarca desde el 16 de marzo de 1945 hasta el 4 de enero de 1947)
Editorial Sanz y Torres, S.L.
Colección Ignitus
Madrid.
(2010)
Conversaciones con Sri Ramana Maharshi
Tomo I y Tomo II
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2006)
SER
SER
SER
=.Dakshinamurti.=
OM SHANTI SHANTI SHANTI
OM PAZ PAZ PAZ
Si uno que Te considera como sin forma quiere todavía verte a Ti, es como aquel que deambula por el mundo queriendo ver el éter (ubicuo, invisible).
Meditando en Tu Ser sin forma, sin pensamiento alguno, mi forma (mi entidad separada) se disuelve como una muñeca de azúcar en el océano.
Y cuando me doy cuenta de quién soy yo, ¿qué existencia tengo yo aparte de Ti, ¡Oh!, Tú que permaneces como la poderosa Colina Aruna?
4. Buscar a Dios ignorándote a Ti que permaneces como la Existencia y brillas como la Consciencia es como buscar la oscuridad con una lámpara en la mano.
Para revelarte a Ti mismo al fin como Existencia-Consciencia, Tu moras tomando formas distintas en todas y cada una de las religiones.
Si todavía hay gente que no logra verte a Ti como Existencia-Conciencia, ellos no son mejores que el ciego que no tiene conocimiento de la existencia del Sol.
¡Oh poderosa montaña Aruna!, Joya incomparable, permanece y brilla, como el Primero sin el segundo, como el Ser dentro de mi Corazón.
5. Como el hilo que mantiene unidas a todas las perlas en un collar, así eres Tú que insertas y unes a todos los seres y a todas las religiones.
Si, como una joya que es cortada y pulida, la separada mente es afilada con la piedra de afilar de una Mente pura universal, obtendrá la luz de tu Gracia y brillará como un rubí cuya luminosidad no se verá ensombrecida por ningún otro objeto.
Cuando la luz del Sol ha caído sobre una placa fotográfica, ¿podría la placa registrar otra imagen?
A parte de ti, ¡Oh Montaña Aruna! luminosa, auspiciosa, ¿existe alguna otra cosa?.
6. Sólo Tú existes, ¡Oh Corazón!, resplandor de la Consciencia.
En Ti mora un poder misterioso, un poder que sin Ti no es nada.
De ello (de este poder de manifestación) procede, junto con un veedor, una serie de sutiles pensamientos sombríos que, iluminados por la luz reflejada de la consciencia en medio de las vueltas que da el destino (prarabdha), aparecen simultáneamente, dentro como un espectáculo impreciso del mundo y fuera como el mundo percibido a través de los cinco sentidos, como una película que es proyectada a través de una lente.
Sean percibidos o no, esos (pensamientos) no son nada aparte de Ti, ¡Oh Colina de Gracia!.
7. Si el pensamiento "yo" no existe, ningún otro pensamiento puede existir.
Cuando surjan otros pensamientos, uno debe preguntarse "¿a quién surgen? ¿A mí? ¿De donde surge este "yo"?"
Indagando de esta manera dentro, si uno rastrea la fuente de la mente y llega al Corazón, uno deviene el Soberano Señor del Universo.
No habrá más ilusiones tales como dentro y fuera, bien y mal, nacimiento y muerte, placer y dolor, luz y oscuridad, ¡Oh océano ilimitado de Gracia y Luz!, Arunachala, que baila la danza de la quietud en la Corte del Corazón.
8. Las gotas de lluvia derramadas por las nubes, que surgen del mar, no descansarán, a pesar de todos los obstáculo, hasta alcanzar una vez su morada, el océano.
El alma encarnada procedente de Ti, a través de las diferentes vías elegidas por él mismo, puede vagar sin rumbo fijo durante un tiempo, pero no podrá descansar hasta reunirse Contigo, la fuente.
Un pájaro puede volar de aquí para allá, pero no puede posarse en mitad del cielo.
Debe retroceder por el camino que vino para buscar, solo en la tierra, su lugar de descanso.
Así, el alma debe volver hacia Ti, ¡Oh Colina Aruna! y fundirse de nuevo solamente en Ti, Océano de Felicidad.
SER
Sri Arunáchala Stuti Pachakam
(La Guirnalda Nupcial de Letras en Alabanza de Sri Arunáchala)
Sri Ramana Maharshi
Ignitus Ediciones, S. L.
Madid.
(2009)
SER
(El Verdadero Conocimiento de la Realidad Última)
Sri Ramana Maharshi
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2007)
Sri Ramanopadesa Noonmalai
(Guirnalda de Tratados de Instrucción Espiritual)
Sri Ramana Maharshi
Comentado por Sri Sadhu Om
(En este libro también están Nam Yar ¿Quién soy yo? y Upadesa Undiyar comentados por Michael James)
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2009)
Guru Vachaka Kovai
(Colección de Enseñanzas de Sri Ramana Maharshi)
Sri Muruganar
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2007)
Padamalai
Enseñanzas de Sri Ramana Maharshi
Sri Muruganar
Editorial Sanz y Torres, S.L.
Colección Ignitus
Madrid.
(2010)
SER
SER
SER
SE LO QUE ERES
(Las Enseñanzas de Sri Ramana Maharshi)
Primera edición en Español publicada por Sri Ramanasramam
Tiruvannamalai, 606603, India.
(1994)
.INDAGACIÓN DEL YO.
Teoría.
Cuando se le preguntaba qué práctica espiritual recomendaba para facilitar la conciencia del Ser, aconsejaba una técnica que denominó la indagación del yo.
La indagación del yo tiene por objetivo descubrir por propia experiencia que la mente no existe.
Sri Ramana afirmaba que la indagación del yo se podría lograr simplemente al soltar la idea de que hay un ser individual que funciona a través del cuerpo y la mente.
De acuerdo a Sri Ramana, toda actividad consciente de la mente o el cuerpo supone tácitamente que hay un "yo" haciendo algo.
El factor común : "yo pienso", "yo me acuerdo", "yo actúo", es el "yo" que asume la responsabilidad de todas las actividades.
Sri Ramana llamaba a este factor común el "pensamiento-yo" (aham-vritti).
(Aham-vritti literalmente quiere decir "la modificación mental del yo").
El Ser o "Yo" real nunca se imagina que está haciendo o pensando algo; mientras que el "yo" que imagina todo esto es una creación mental y por eso se le denomina una modificación mental del Ser.
Sri Ramana afirmaba que la noción de individualidad no es nada más que el "pensamiento-yo" que se manifiesta en diversas formas.
En lugar de tomar las distintas actividades de la mente (el ego, el intelecto, la memoria) como funciones separadas, prefería verlas como distintas formas del "pensamiento-yo".
Al decir que la individualidad es igual a la mente y la mente es igual al "pensamiento-yo", se concluye que la desaparición del sentido de individualidad (o sea la realización del Ser) implica también la desaparición tanto de la mente como del "pensamiento-yo".
Esto lo afirmaba en sus frecuentes comentarios sobre el estado después de la realización del Ser en el cual no hay un pensador de pensamientos, no hay un actor de acciones, ni conciencia de una existencia individual.
El"pensamiento yo" es una suposición que no tiene existencia real, explicaba Sri Ramana que su aparición dependía de la identificación con un objeto.
Cuando surgen pensamientos, el "pensamiento-yo" los reclama como propios :
"yo pienso", "yo creo", "yo quiero", "yo estoy actuando".
No hay un "pensamiento-yo" que exista en forma independiente de los objetos con los cuales se identifica.
Aparenta existir como entidad real y continúa debido al flujo incesante de identificaciones que suceden.
Casi todas las identificaciones se basan en la premisa inicial que el "yo" está limitado al cuerpo, ya sea como dueño, ocupante o coexistente con la forma física.
Esta idea, "yo soy el cuerpo", es la fuente inicial de todas las identificaciones equivocadas y su disolución es la meta principal de la indagación del yo.
Sri Ramana afirmaba que la tendencia hacia las identificaciones auto-limitantes podían disminuir si se trataba de separar el sujeto "yo" de los objetos con los cuales se habían identificado.
Dado que el "pensamiento yo" individual no puede existir sin un objeto, si la atención se enfoca hacia la percepción subjetiva del "yo" o "yo soy" con tal intensidad que los pensamientos "yo soy esto" o "yo soy aquello" no surgen, entonces el "yo" individual no podrá conectarse con los objetos.
Si se mantiene la conciencia del "yo", el "yo" individual ( o sea, el pensamiento "yo") desaparecerá, y en su lugar habrá una experiencia directa del Ser.
Esta atención constante a la conciencia interna "yo" o "yo soy" fue denominada por Sri Ramana indagación del yo (vichara) y la recomendaba constantemente como la vía más efectiva y directa para descubrir la irrealidad del "pensamiento yo".
La etapa en la cual se tiene la experiencia del sujeto (el que ve) en lugar de la conciencia de un objeto (lo visto) es la fase culminante de la indagación del yo.
Algunas veces, mencionaba que pensar o repetir la palabra "yo" mentalmente también lo lleva a uno en la dirección correcta, pero es importante notar que esto es solamente una etapa preliminar de la práctica.
La repetición del "yo" todavía involucra a un sujeto (el "pensamiento yo"), que tiene la percepción de un objeto (los pensamientos "yo, yo"), y mientras exista esa dualidad el "pensamiento yo" continuará sobreviviendo.
Sólo desaparecerá finalmente cuando la percepción de todos los objetos, tanto físicos como mentales, haya cesado.
Esto no se logra a través de estar consciente de un "yo", sino solamente siendo el "yo".
La fase culminante de la indagación del "yo", es la etapa en la cual se tiene la experiencia del sujeto en lugar de la conciencia de un objeto.
Sri Ramana afirmaba consistentemente que la mayoría de las demás prácticas no eran efectivas.
Frecuentemente subrayaba que las meditaciones tradicionales y prácticas de yoga requieren de un objeto, y usualmente añadía que este tipo de relación reforzaba el "pensamiento yo", en lugar de eliminarlos.
Tales prácticas pueden aquietar la mente, y quizás produzcan experiencias de gozo, pero no terminarán en la realización del Ser porque el "pensamiento yo" no ha sido aislado y desprovisto de su identidad.
.INDAGACIÓN DEL YO.
.Práctica.
Sri Ramana aconsejaba a los principiantes en la práctica de la indagación del yo, que pusieran su atención sobre la percepción interior de "yo" y que la mantuvieran el mayor tiempo posible, indicaba que si la atención se dispersaba debido a otros pensamientos, que la revirtieran sobre el "pensamiento yo".
Sugería diversos apoyos para continuar el proceso, tal como el preguntarse :
"¿Quién soy yo?" o bien "¿De dónde surge este yo?".
Pero la meta final es estar continuamente atento al "yo" que asume la responsabilidad de todas las actividades del cuerpo y la mente.
En las primeras etapas de la práctica la atención que se le da a la percepción de "yo" es una actividad mental asimilable a un pensamiento o una sensación.
Al desarrollar la práctica, el "pensamiento-yo" se convierte en una sensación subjetiva de la experiencia de "yo" y cuando dicha sensación deja de conectarse e identificarse con pensamientos y objetos, desaparece completamente.
Lo que queda es una experiencia de la existencia en la cual el sentido de individualidad ha dejado de operar temporalmente.
Al principio la experiencia puede ser intermitente, pero con una práctica repetida se vuelve más fácil de obtener y mantenerla.
Cuando la indagación del yo llega a este nivel, hay una conciencia sin esfuerzo por existir, en la cual ese esfuerzo individual ya no es posible dado que el "yo" que hace el esfuerzo ha dejado de existir momentáneamente.
No es aún la realización del Ser porque el "pensamiento-yo" vuelve a surgir periódicamente, pero es la etapa más elevada de la práctica.
La experiencia de este estado de existencia en repetidas ocasiones va debilitando y destruyendo las vasanas (tendencias mentales), causantes del "pensamiento-yo".
Cuando estas tendencias mentales se debilitan lo suficiente, el poder del Ser destruye las tendencias residuales en forma total y el "pensamiento-yo" nunca vuelve a surgir.
Este es el estado final e irreversible de la realización del Ser.
No es un ejercicio de concentración, ni trata de suprimir los pensamientos : meramente procura prestar atención a la fuente de donde surge la mente.
El método y meta de la indagación del yo es mantenerse en la fuente de la mente y estar atento a lo que uno realmente es, al quitar la atención e interés de lo que uno no es.
Durante las etapas iniciales el esfuerzo de transferir la atención de los pensamientos al pensador es esencial, pero una vez que la sensación del sentido de "yo" se ha establecido firmemente, cualquier esfuerzo adicional es contraproducente.
De allí en adelante se vuelve un proceso más bien de ser y no de hacer : de ser, sin esfuerzo y no de un esfuerzo por ser.
Ser lo que uno ya es no requiere de esfuerzo, dado que el sentido de ser siempre está presente y siempre se experimenta.
Por otro lado, el pretender ser lo que uno no es (o sea el cuerpo y la mente), requiere de esfuerzos mentales constantes, aunque se lleven a cabo a un nivel subconsciente.
Por lo tanto, en las últimas etapas de la indagación del yo los esfuerzos restan atención a la experiencia de ser, mientras que el cesar esfuerzos mentales la revela.
En fin, el Ser no se puede descubrir haciendo algo, sino solamente siendo.
Como dijo Sri Ramana una vez :
"¡No medite : sea!
"¡No piense que es : sea!
"¡No piense como ser : usted es!"
La indagación del yo no se debe calificar como una práctica de meditación que se lleva a cabo a ciertas horas y en ciertas posturas; debe continuar a través de todo el día mientras estemos despiertos, sin importar la actividad que desempeñemos.
Sri Ramana no veía ningún conflicto entre el trabajo ordinario y la indagación del yo; decía que con un poco de práctica se podía llevar a cabo en todo tipo de circunstancias.
A la vez, decía que para los principiantes, periodos regulares de práctica formal eran útiles, pero nunca fue partidario de largos periodos de meditación en silencio y sentado.
Además siempre se opuso a que alguno de sus devotos expresara el deseo de dejar sus actividades mundanas a favor de una vida meditativa.
"Yo existo" es la única experiencia permanente y auto-evidente de toda persona.
Nada es tan evidente como "yo soy".
Lo que la gente llama evidente, es decir, la experiencia que se obtiene a través de los sentidos, no es para nada auto-evidente.
Sólo el Ser se presenta como tal.
Por lo tanto, llevar a cabo la indagación del yo y ser el "yo soy" es lo único que uno debe hacer.
"Yo soy" es la Realidad.
Yo soy "esto" o lo "otro" es irreal.
"Yo soy" es la verdad; es otro nombre para Ser.
La devoción es solamente conocerse a sí mismo.
Al ver cuidadosamente, se constata que la devoción suprema y jñana son en esencia uno y lo mismo.
Decir que uno de los dos es el camino hacia el otro se debe a que no se conoce la naturaleza de ambos.
Sepa que el camino de jñana y el de la devoción están interrelacionados.
Siga estos dos inseparables caminos sin separar uno del otro.
SER
SER
SER
Sea lo que usted es
(Las enseñanzas de Sri Ramana Maharshi)
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2007)
Día a día con Bhagavan
De un diario de
A. Devaraja Mudaliar
(Que abarca desde el 16 de marzo de 1945 hasta el 4 de enero de 1947)
Editorial Sanz y Torres, S.L.
Colección Ignitus
Madrid.
(2010)
Conversaciones con Sri Ramana Maharshi
Tomo I y Tomo II
Ignitus Ediciones, S.L.
Madrid.
(2006)
SER
SER
SER
=.Dakshinamurti.=
OM SHANTI SHANTI SHANTI
OM PAZ PAZ PAZ
-.SER.-